Cualquier matrimonio que decide divorciarse o separarse, se enfrenta a una situación de incertidumbre, a un escenario desconocido que genera no pocas dudas como ¿qué pasos hay que dar? ¿cuáles son los requisitos? o, ¿por dónde tenemos que empezar?.
Pues bien, en este artículo, venimos a resolver algunas de las cuestiones que más dolores de cabeza generan a la mayoría de parejas que deciden romper su matrimonio. Precisamente vamos a explicar qué es y en qué consiste el divorcio amistoso conocido en la jerga judicial, como divorcio de mutuo acuerdo.
¿Qué es el divorcio de mutuo acuerdo?
En pocas palabras, el divorcio de mutuo acuerdo es aquel en el que los cónyuges alcanzan un pacto sobre las condiciones en las que se quieren divorciar y las medidas que afectan a los hijos en común, como la guarda y custodia de los niños, la pensión de alimentos a favor de estos, los gastos extraordinarios, el uso y disfrute de la vivienda familiar, el régimen de visitas o la liquidación y reparto de los bienes comunes habidos en el matrimonio.
Teniendo en cuenta que la ley permite elegir dos vías diferentes para tramitar un divorcio, y que solo en una de estas modalidades los cónyuges pueden redactar a su medida un convenio regulador, resulta evidente cuál es la mejor opción.
Un tipo de divorcio que tiene innumerables ventajas. No solo es infinitamente más rápido que un divorcio contencioso, además es más económico y se evitan los reiterados e indeseados encuentros en los tribunales porque no se celebra un juicio. Y por supuesto, el que más beneficia a los hijos en común porque reduce la conflictividad entre los padres.
¿Qué requisitos se tienen que cumplir?
Antes de continuar explicando paso a paso el divorcio de mutuo acuerdo, conviene recordar que para divorciarse en España, es necesario cumplir con dos requisitos:
1. Que hayan transcurrido tres meses desde la celebración del matrimonio, salvo que se acredite la existencia de un riesgo para la vida, la integridad física, la libertad, la integridad moral, o libertad e indemnidad sexual del cónyuge demandante o de los hijos de ambos, o de cualquiera de los miembros del matrimonio.
2. Que al menos uno de los cónyuges resida en España.
Dicho esto, ¿por dónde comenzar?, ¿cuáles son los pasos que se deben dar para divorciarse de mutuo acuerdo?
Pasos a seguir en el divorcio amistoso
Escoger a un abogado especialista en divorcios y Derecho de Familia
Puede resultar de sentido común, pero no todas las personas se preocupan de contratar un abogado especializado en Derecho de Familia y más concretamente en divorcios o separaciones matrimoniales. Ni que decir tiene que esto es importantísimo para evitar sorpresas desagradables.
Son muchos los casos en los que por compromiso se acude a un abogado porque es “amigo o conocido de alguien” o porque se encargó de aquel accidente de tráfico, o del despido de un familiar, y los resultados no son ni de lejos, los esperados.
Por eso, recomendamos huir de aquellos abogados que son expertos en todo y buenos en nada. Un abogado experto en Derecho de Familia es el mejor en esa materia, no es un abogado experto en divorcios-despidos-accidentes-impuestos, etc.
Al margen de valorar sus conocimientos especializados y experiencia jurídica, se debe considerar su empatía y capacidad de negociación. Porque un proceso de separación o divorcio, es una de las etapas vitales más sensibles a las que puede enfrentarse cualquier persona, máxime cuando hay hijos de por medio. Y porque un abogado de familia debe ser capaz de encontrar soluciones amistosas que traten de llevar el divorcio por la vía del mutuo acuerdo y no avivar las llamas e incitar a pelar a toda costa en los tribunales, iniciando un divorcio contencioso que resultará más largo y costoso.
Por último, en un divorcio de mutuo acuerdo, cabe la posibilidad de elegir un único abogado para los dos cónyuges. Pero también puede que cada uno prefiera tener a su propio abogado de familia, porque a pesar de querer tramitar el divorcio de forma amistosa, existan algunos puntos de discusión que generan tensión y desconfianza entre ellos.
Preparar el convenio regulador de divorcio
En los divorcios de mutuo acuerdo, la buena noticia es que son los propios cónyuges los que, con el asesoramiento especializado de un abogado de familia, alcanzan un pacto sobre las condiciones en las que se quieren divorciar y las medidas que afectan a los hijos en común. Todos estos acuerdos quedan reflejados en un documento que se llama convenio regulador, que se redacta como un “traje a medida” y que se presenta junto con la demanda en el juzgado para su aprobación, y en el que, al menos, se tienen que regular los siguientes aspectos:
- Guarda y custodia de los hijos.
- Régimen de visitas, comunicaciones y estancias.
- Pensión de alimentos y cómo se reparten los gastos.
- Atribución del uso de la vivienda familiar, y del ajuar.
- La liquidación del régimen económico del matrimonio, en caso de que proceda.
- La pensión compensatoria, si procede, porque a uno de los cónyuges el divorcio le produzca un desequilibrio económico
Presentar la demanda y el convenio regulador de divorcio
Una vez se ha preparado la demanda de divorcio y firmado el convenio regulador, llega el momento de presentarla ante los juzgados correspondientes al domicilio familiar. De ello se encarga el procurador de los tribunales, que es quien realmente representa a las partes y se encarga de todas las comunicaciones con el juzgado.
Al margen del convenio regulador, la demanda de divorcio se presenta con otros documentos que son necesarios, como el certificado de matrimonio, certificado de nacimiento de los hijos, certificado de empadronamiento de la unidad familiar, y copia del Libro de Familia.
Tras la presentación de toda esta documentación, el juzgado comprobará que se reúnen todos los requisitos formales, y de ser así, admitirá la demanda a trámite, señalando la fecha y hora para que los cónyuges vayan a ratificarse ante el juzgado que les corresponda.
Acudir al juzgado para ratificar el divorcio
¿En qué consiste la ratificación? Esta es la pregunta que más se hacen los cónyuges. Pues bien, los interesados deben acudir en la fecha y hora fijadas por el juzgado, provistos del D.N.I. y por supuesto acompañados de su abogado y procurador, para manifestar ante el tribunal que están conformes con la decisión de divorciarse de mutuo acuerdo y con todos los extremos acordados en el convenio regulador que firmaron.
Cada uno entrará por separado a la sala del juzgado, pudiendo leer o revisar el convenio regulador si lo desea, y manifestará su conformidad, es decir, se ratificará en su decisión mediante su firma presencial y ante los ojos del tribunal. No obstante, es posible que si es un divorcio con hijos menores, el fiscal o el juez planteen alguna aclaración sobre el convenio regulador, o incluso modificación, respecto de las medidas que tengan relación con los menores de edad. En ese supuesto, el abogado podrá aclarar lo que considere oportuno o bien, solicitar un breve receso para hablar con los cónyuges y efectuar las modificaciones que se consideren necesarias en ese mismo acto.
Recibir la sentencia de divorcio
Los plazos son variables, ya que depende de la carga de trabajo de cada juzgado. Para más información sobre cuánto tiempo dura un divorcio, recomendamos leer este artículo.
Con carácter orientativo, el juzgado dictará la sentencia y la notificará a los ya excónyuges pasadas un par de semanas desde la ratificación. Desde este momento, tendrán que transcurrir veinte días para que la sentencia sea firme, y en consecuencia, que el convenio regulador quede judicialmente homologado. Aunque ello no implica que no sea de obligado cumplimiento, ya que no deja de ser un contrato privado entre dos partes, que produce efectos desde la fecha en que se firmó de mutuo acuerdo.
Para afrontar el divorcio con todas las garantías, recomendamos elegir el mejor abogado especialista para divorcio y separación. Habla con Saverio Abogados sin compromiso. Despacho de abogados especializados en Derecho de Familia en Madrid.