Si bien es cierto que los esquemas de vacunación contra el Covid-19 han dado sobradas muestras de su efectividad alrededor del mundo en los últimos meses, tampoco podemos perder de vista los airados debates que se han producido alrededor de su suministración a los menores de edad.
Dada la abundante información -y desinformación- que se puede hallar tanto en internet como en las Redes Sociales, no debe extrañar que muchas personas no se sientan del todo cómodas con la necesidad de vacunar a sus hijos, incluso cuando ellas mismas ya se hayan vacunado para protegerse del coronavirus.
En términos legales, que es lo que más nos interesa y ocupa, el problema viene cuando de los dos padres separados de un niño menor, uno de ellos está a favor de vacunarlo y el otro se niega. Entonces se produce un desacuerdo en el que, evidentemente, alguna de las partes no acabará satisfecha, y en el que debe mediar un juez para esclarecer la situación y resolverla.
Antes de seguir, es preciso destacar que en este artículo no trataremos los casos en los que existen contraindicaciones que justifiquen el evitar (o como mínimo posponer) la vacunación de un menor, circunstancias en las que será necesario aportar pruebas suficientes por parte de un profesional de la salud para explicar el problema.
¿Debe vacunarse un niño si sus padres no están de acuerdo?
Si ambos padres consideran que el niño no debe vacunarse, es una determinación que corre por su cuenta. Los progenitores tienen el poder de lidiar con la situación, más allá de los inconvenientes que esto genere, pues cada vez más instituciones solicitan el Certificado COVID digital de la UE para permitir el acceso.
Ahora bien, si nos centramos en esas ex parejas en las que uno de los progenitores quiere vacunar al niño, mientras que el otro no quiere hacerlo, entonces entra en juego el entendimiento de la causa por parte de un juez, que evaluará las presentaciones de ambas partes.
Los Juzgados de Familia evaluarán esas razones, a la vez que se presentarán tanto las recomendaciones sanitarias como un informe del Ministerio Fiscal en torno al caso en cuestión, y prevalecerá el interés superior del niño. Con todo esto en su poder, el Tribunal tomará las medidas que crea convenientes.
¿Qué pasa si un padre vacuna a su hijo sin el consentimiento del otro?
Si el padre que está a favor de la vacunación, efectivamente hace vacunar a su hijo sin el consentimiento expreso del otro, se puede iniciar un proceso de jurisdicción voluntaria por inadecuado ejercicio de la patria potestad, y eso podría derivar en un recorte de sus derechos, o no, dependiendo de cómo lo interprete el juez.
Por tanto, ésta es una decisión que concierne a los dos progenitores por igual y que se ejercerá con el consentimiento de ambos, o tras lo dictado por un juez de no haber acuerdo entre padres.
*Desde Saverio Abogados queremos destacar que, con el objetivo de evitar problemas futuros, es recomendable dejarse asesorar por un abogado familiar con experiencia.