Si hay un tema sensible dentro del ámbito del Derecho de Familia, probablemente ese sea la potencial separación de hermanos que se discute en algunos procesos de divorcio, en los que los hijos son “disputados” por los padres.
En efecto, aunque es habitual que en una separación los menores sean los principales perjudicados, existen casos aún más complejos, aquellos en los que entra en juego una posible separación de los hermanos.
Entendiendo que por el interés superior de los niños involucrados, el primer reflejo es no separar a los hermanos en su guarda y custodia, hay situaciones en las que esta situación debe tomarse en consideración al no quedar otra salida.
¿Qué dice la jurisprudencia y por qué cada familia es un mundo?
De inicio, el artículo 92.5 del Código Civil establece que, a la hora de determinar la guarda y custodia a los progenitores, el juez que practica la causa debe procurar no separar a los hermanos; sin embargo, no siempre es una opción.
La práctica demuestra que hay excepciones en este sentido, y más de un pronunciamiento en la jurisprudencia. Evidentemente, existen razones de peso que son las que justifican esta alternativa poco agradable.
Por ejemplo, la sentencia del Tribunal Supremo de 25 septiembre 2015 acordó separar a hermanos tras el divorcio de sus padres, aunque con la salvedad de ser un matrimonio con cuatro hijos, en el que los dos mayores fueron a instalarse con su padre a Gijón mientras los dos menores permanecieron en Madrid junto a su madre, para completar su etapa de formación inicial. Esto demuestra que los intereses varían según circunstancias.
¿Qué factores se deben tener en cuenta?
Interés superior del menor
Es el elemento que condiciona a todos los demás, y el magistrado debe actuar como parte que vela por el efectivo cumplimiento de este derecho, priorizándolo respecto de diversos planteamientos.
Opinión de los hijos
Indudablemente, el interés superior del menor juega un papel importante en estas decisiones, y no es en absoluto insustancial. Normalmente el juez mantiene una serie de encuentros con el o los hijos en común antes de tomar una decisión.
Otras cuestiones importantes
También se deben considerar ciertos fundamentos que podrían inclinar la balanza hacia la separación de los hermanos, como si la custodia es compartida o no, las posibilidades de mantener un régimen de visitas entre hermanos y con el progenitor con quien no estuvieran conviviendo, etc., y que deberán ser evaluados oportunamente por el tribunal.
En resumen, la separación de los hermanos en la guarda y custodia tras el divorcio tiene varias dimensiones. Quien esté atravesando una situación de separación en la que deba exponer su punto de vista como progenitor para evitar la separación de hermanos o eventualmente reclamarla, deberá contar con la asistencia de un profesional en la materia, un abogado familiar que tenga experiencia en esta clase de juicios tan complejos.