Procedimiento de incapacitación judicial: cómo podemos ayudarte

Tras el cambio en agosto de 2021 relativo a la legislación sobre incapacitación judicial, y el escaso tiempo que ha transcurrido desde aquellas modificaciones, son muchos los clientes que recurren a sus abogados para plantearles sus dudas al respecto. 

Por ello hoy veremos las principales novedades alrededor de este concepto y su aplicación en la ley.

Lo primero que debe aclararse es que, en caso de tener que presentar una solicitud para una incapacidad, se debe contar con un abogado experto en la materia, junto a un procurador que le acompañe. Dicho esto, es indispensable comprender qué significa incapacitar, y cuáles son los pasos a seguir en tal caso.

 

¿De qué trata la incapacitación?

La incapacidad es la figura central que define a los procesos judiciales que han sido especialmente diseñados para proteger los bienes y los derechos de las personas «incapacitadas», entendiendo así a las que no tienen capacidad de gobernarse a sí mismas. Esto puede ser como consecuencia de una enfermedad física, mental y/o psíquica. Generalmente, estas personas tienen alguien que les representa en el ejercicio de sus derechos.

 

¿Quién puede ser declarado incapaz?

En la medida en que haya causas legales que justifiquen el declarar a un individuo incapaz, cualquiera puede ser considerado legalmente bajo esta figura siempre que sufra una deficiencia comprobable mediante la realización oportuna de los exámenes médicos y el reconocimiento judicial que den cuenta de su imposibilidad definitiva.

Por supuesto, en el caso de los menores que padecen alguna clase de deficiencia ya irreversible, se razona que no serán sujetos adultos autónomos, por lo que pueden ser declarados incapaces siguiendo ese citado procedimiento.

 

Causas suficientes para solicitar una incapacidad judicial:

  • Enfermedad irreversible que impida el autogobierno;
  • Falta de cuidados de la propia salud y/o actividades básicas;
  • Llevar a cabo actos que ponen en peligro su salud y/o su patrimonio;
  • Personas que conviven con situaciones de abusos, negligencias o maltratos;
  • Personas que atraviesan procesos de deterioro cognitivo grave sin cura ni tratamiento.

 

¿Quién puede solicitar la incapacitación de un individuo?

Cualquier persona que conozca de la concurrencia de otro en las causas que acabamos de mencionar, puede solicitar la incapacitación poniendo el caso en conocimiento del Ministerio Fiscal para que inicie el procedimiento.

Cónyuges o parejas de hecho, ascendientes o descendientes, hermanos e incluso amigos suelen ser quienes soliciten que se declare formalmente la incapacidad de un individuo, que en última instancia debe incluirse en uno de estos tipos.

  • Incapacidad total: la persona no tiene autonomía en ninguno de los aspectos de su vida, por lo que le es asignado un representante que vele por su protección y su patrimonio en el momento en que haga falta.
  • Incapacidad parcial: la persona no tiene autonomía en ciertos aspectos de su vida, por lo que le es asignado un representante que vele por su protección y su patrimonio, pero sólo en determinadas circunstancias.

Es el juez que atiende el expediente quien tiene que establecer cuándo se requiere la intervención del asesor o representante. Por lo tanto, la incapacidad no tiene que significar necesariamente la pérdida total de los derechos del incapacitado. 

Si lo deseas, puedes ponerte en contacto con nuestro despacho de abogados especialistas en Derecho de Familia para consultarnos tu situación.

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